Por la mañana del lunes, campesinos del Movimiento en Defensa del Agua de la Cuenca Libres-Oriental, realizó una manifestación frente al templo de San Francisco para mantener presente la exigencia del no usar las bombas antigranizo.
Aunque se trasladaron a la capital del estado, el Consejo de Vigilancia del municipio de Cuyoaco se topó con la sorpresa de que las puertas de la Casa Aguayo se encontraban cerradas y custodiadas por elementos de la Policía Municipal, los cuales no les permitieron el acceso.
Nueve comisionados y ejidatarios pidieron que, Miguel Barbosa, ofrezca un diálogo abierto entre los campesinos y las autoridades a realizarse en el auditorio de San Andrés Payuca, en Cuyoaco. Manifestaron que la escasez del agua se debe a que otras empresas han estado utilizando bombas antigranizo para frenar las lluvias provocando la afectación de sus cultivos. De igual forma, acusaron que Conagua otorga concesiones de pozos y norias a los hacendados, lo que la usan sin medida, provocando que sea aún más dificil la situación actual de la Cuenca.
Los agricultores exigen que el ejecutivo estatal emita un decreto para ponerle un alto inmediato al bombardeo hacia las nubes u alguna otra acción que detenga las lluvias, que se den concesiones de agua a todos los ejidos y pueblos mediante pozos de riego o norias y que se indemnice a todos los agricultores por las pérdidas en sus cultivos.